La primera repercusión que tendrá es que los empleados tenderán a desmotivarse como tónica general, pues al fusionarse dos cajas de la misma comunidad se van a cerrar muchas sucursales y por lo tanto muchos trabajadores van a perder su puesto de trabajo, la mayoría de ellos van a tener que estar a cargo de nuevos jefes e incluso puede que también los cambien de puesto de trabajo o de oficina.
Además cuando se realiza un proceso de absorción entre dos entidades bancarias, siempre hay una que trabaja mejor que la otra, o lo que es lo mismo, que haciendo las mismas tareas y actividades, una es mas productiva que la otra, que esta suele ser la entidad absorbente, por lo tanto se tiene que realizar un proceso de reestructuración para que ambas entidades se fusionen en una entidad y sea competitiva.
Para iniciar este proceso, los trabajadores de la entidad absorbida tendrán que estar expuestos a un control exhaustivo de la productividad y en caso de que no lleguen a la productividad o a los objetivos marcados, se tendrán que plantear diferentes posibilidades para mejorar la efectividad, ya que sino podrán llegar a tener penalizaciones salariales e incluso a perder su puesto de trabajo.
Para los trabajadores que no se despidan, se tendrá que realizar un plan de carrera, sobretodo para aquellas personas que sean consideradas estratégicas para el proceso de absorción y por otra parte se tendrá que plantear un plan desde el departamento de recursos humanos para reducir la plantilla con el objetivo de alcanzar la plantilla deseada con el menor coste posible. Para realizar tal proceso será necesario contar con un buen SIRH (Sistema de Información de Recursos Humanos) con la finalidad de barajar las diferentes hipótesis que mejor le convengan a la empresa.
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