Una cuestión que a día de hoy todavía se están planteando los grandes gurús de la economía española. Si analizamos bien la situación de la economía española, podríamos darnos cuenta que podría haber sido peligroso para el sistema financiero que los bancos reconocieran de golpe el valor real de los activos que tienen en cartera, ya que muchos de ellos estaban tasados por encima del valor real y hubiera provocado unas perdidas exuberantes que podrían haber ocasionado una crisis financiera irreparable.
Bajo mi punto de vista, todas las operaciones de maquillaje sobre los activos que han hecho, han sido con la finalidad de no crear alarma social y mostrar síntomas de tranquilidad y control, ya que de lo contrario, la gran mayoría de los bancos hubieran tenido importantes perdidas en los balances por deterioro del inmovilizado y los clientes asustados por el pánico hubieran ido corriendo a sacar el dinero y hubiera provocado un caos social. Esta medida no es que haya sido ni mejor, ni peor simplemente se ha hecho con el fin de estabilizar el sistema financiero.
Ahora que ya estamos entrando en una segunda fase de la crisis, creo que deberían volver a tasar los activos para ir reflejando el valor real, sino de lo contrario, el Banco de España, que es el encargado de controlar los bancos y pasar los informes al Banco Central Europeo no puede saber con exactitud el estado de las entidades financieras españolas.
Haciendo una breve síntesis de lo que estamos viviendo, mi opinión no es que haya sido una buena operación, pero también es cierto que estamos viviendo una crisis muy dura de confianza y seguridad, y cuando digo confianza me refiero a que la gente esta perdiendo la seguridad y la motivación sobre el futuro de la economía española.
Una de las soluciones que mas podría beneficiar a solventar los problemas que tenemos en la actualidad, seria dar apoyo a las pequeñas y medianas empresas, que les han bloqueado el crédito y muchas de ellas teniendo trabajo han tenido que cerrar las puertas; en segundo lugar regularía y gestionaría el control de los bancos, actualmente tienen mucho poder de mercado, si se juntaran los principales bancos y decidieran quebrar ESPAÑA, solo seria cuestión de minutos. Posteriormente fomentaría la compra de las viviendas, todavía quedan muchos jóvenes que quieren adquirir una vivienda, solo están esperando a que llegue el momento oportuno y la mejor forma sería fomentando la adquisición de viviendas con ayudas fiscales interesantes o forzando a las constructoras a rebajar el precio de las viviendas.
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